El ejecutivo también habló de Bitcoin, Ethereum y Cardano, además del fenómeno de Dogecoin y Shiba Inu, entre otros importantes temas del ecosistema de las criptomonedas.
Binance es el mayor exchange de criptomonedas y NFTs del mundo, con 1.400.000 transacciones por segundo y un volumen de comercio de US$2 mil millones cada 24 horas.
Su plataforma es una de las más completas que existen, contando con una academia, una propia red (Binance Chain) y herramientas de ahorro en activos digitales, entre muchos otros.
Este intercambio fue creado en 2017 por Changpeng Zhao, joven emprendedor quien hoy actúa como CEO de la compañía, cuyas sedes centrales se ubican en Taiwán.
En una conversación exclusiva con MudFeed Geek, Maximiliano Hinz, director de Operaciones de Binance Latinoamérica, nos cuenta sobre los planes de la compañía, los desafíos de cara al futuro y las implicaciones de los anuncios de El Salvador.
¿Qué son las criptomonedas?
Las criptomonedas son la forma que tenemos de utilizar la blockchain, que es -básicamente- un libro contable, que en este caso registra Bitcoin (BTC), Ethereum (ETH) o USDT, entre otros.
Esto es bueno, pues se trata de una tecnología descentralizada, es decir, si no estamos todos de acuerdo con las modificaciones que se están realizando en el libro, no pueden suceder, ya que existe todo un sistema automatizado que se encarga ello.
Esto permite que nadie pueda inventar transacciones, por ejemplo, en BTC no puede existir jamás un doble gasto, es decir, que la misma moneda sea usada al mismo tiempo.
¿Cuál es el interés de Binance en Latinoamérica?
En Binance vemos un mercado con muchísimo interés por el mundo de las criptomonedas, la adopción ocurre de forma rápida. Esto es por la descentralización de estas divisas digitales, que no tienen a nadie que les ponga restricciones. Nos permite ahorrar y moverlas donde queramos, que es algo en lo que ciertos países de Latinoamérica tienen problemas.
Con la entrada de nuevos usuarios, ¿en qué están trabajando en Binance para acompañar esa mayor demanda?
Tenemos la academia, clases online o webinars, entre otros, elementos que permiten interiorizarse en este mundo, pues se trata de una tecnología nueva. Nuestra expectativa es que la gente pueda aprender, y que no tengan ningún tipo de barrera al acceso.
Tener un liderazgo a nivel mundial también representa un gran desafío, ¿cómo lo están enfrentando en Binance?
Nuestra estrategia es trabajar siempre cerca del cliente, buscando que la experiencia sea lo más fácil posible. Entonces, cuando vemos que hay un tipo de problema o incertidumbre por parte del público, nos enfocamos inmediatamente en cómo ayudarlos. En definitiva, nosotros trabajamos para ellos.
Si la experiencia de usuario es mala, no podríamos subsistir. La competencia es muy ardua, y tratamos de mejorar día a día. En ese sentido, la mayor cantidad de nuestros recursos se invierte en explicar a la gente cómo usar nuestra plataforma y, al mismo tiempo, escuchar qué nos dicen.
¿Binance ha tenido contacto con desarrolladores de Latinoamérica? ¿Veremos una criptomoneda de la región en la plataforma?
Somos muy exigentes a la hora de listar una criptomoneda dentro de nuestra plataforma, pero si es avalada por el público, va a ser listada.
Nosotros ofrecemos a la gente y sociedad una alternativa segura y confiable, garantizando que todos los proyectos que tengamos cumplan con estas características. Si en los próximos años se desarrollan en la región -o en cualquier parte del mundo- iniciativas con estos requisitos, no van a existir barreras de acceso.
A partir de la crisis sanitaria, en Chile se extendieron las renovaciones de cédulas de identidad, permitiendo que podamos seguir con ellas a pesar de que estén vencidas. Esto ha provocado problemas con el proceso de verificación de las cuentas en Binance, ya que la plataforma no las reconoce como válidas. ¿Están trabajando en ello?
Estamos al tanto de la situación, y ya hablamos con el proveedor que está encargado de este proceso, para poder brindar una solución a nuestros usuarios.
El sistema funciona de manera automática, por lo que rechaza las solicitudes al detectar que la cédula está vencida. Sin embargo, al realizarse este trámite de forma manual, la verificación pasa sin problemas.
Desde un plano global, cada cierto tiempo vemos a China u otro país tomando medidas en contra de las criptomonedas, y el mercado reacciona derrumbándose, pero cada vez estas fluctuaciones son menores, es decir, pareciera que los activos digitales dependieran menos del impacto comunicacional y político. ¿Estamos avanzando hacia una estabilización?
Sin duda. Las noticias siempre son un punto de inflexión, pero están dejando de influir de una manera tan determinante. Por ejemplo, antes el precio de Bitcoin variaba fuertemente tras un tuit de Elon Musk, lo que hoy no ocurre. La gente comenzó a darse cuenta de que él no es la tecnología blockchain, y con China pasa algo similar.
Hace un par de años, cuando ese gobierno tomaba medidas fuertes en contra de las criptomonedas, veíamos un impacto importante, pero a medida que hay más gente dentro del ecosistema, con personas naturales e inversiones institucionales, como se ha venido viendo en el último tiempo, el poder se ha ido volcando a las manos de los usuarios. Es decir, el valor de los activos digitales no está en los gobiernos, sino que en la propia gente.
Continuando con los gobiernos, ¿cómo ves la adopción de Bitcoin en El Salvador? ¿Es un proceso que pudiera contagiar a la región?
Es un gran paso inicial, no solo para Latinoamérica, sino que para el mundo. Creo que, en unos años, la vamos a ver que como una moneda de curso legal a nivel internacional. A medida que más países vayan adoptando estas medidas, va a producirse un cambio en la gente.
Tras la eliminación del patrón oro a nivel mundial, el dinero FIAT es prácticamente ilimitado, es decir, se pueden imprimir tantos billetes como los bancos centrales deseen. En ese sentido, al ser Bitcoin -y otras criptomonedas- un activo digital escaso, con un supply limitado, ¿pudieran algunos países adoptarlo como un activo de refugio frente a los vaivenes de la economía?
El Salvador es el primer país en hacerlo, pues no solo tomó a Bitcoin como moneda de curso legal, sino que adoptó la medida de tener una gran cantidad de estas divisas digitales como activo de refugio. Se trata de una decisión inteligente.
En 2018, hubo una movida bastante grande para que Argentina comprara un 1% del Tesoro Nacional en BTC. Si lo hubiesen hecho, se habrían multiplicado por cinco o seis las reservas que tenían. Desde el punto de vista económico, tiene lógica esa decisión.
Entonces, ¿la adopción está más dada por la presión de la gente o iniciativa propia de los gobiernos?
La gente siempre ayuda a imponer la agenda, pero un buen gobernante es el que tiene la decisión de llevar políticas revolucionarias, que sean disruptivas, y que permitan que su país cambie drásticamente su posición frente al mundo. Hoy, El Salvador ha hecho una gran apuesta con Bitcoin. Si a dos o tres años el precio de BTC continúa su tendencia, no me quedan dudas que fue un movimiento totalmente acertado.
Desde los orígenes de la tecnología de blockchain, hemos visto criptomonedas que ofrecen soluciones a problemáticas técnicas globales, con proyectos que llaman la atención por su respuesta a temáticas como transferencias de dinero o logística, entre muchos otras, pero durante los últimos años han aparecido iniciativas que destacan por su sencillez y facilidad de identificación, lo que las ha impulsado entre el público. Por ejemplo, Dogecoin y Shiba Inu. ¿La aparición de criptomonedas de este tipo está acelerando su adopción por parte de la gente?
El mayor potencial de estas criptomonedas nuevas está dado por el marketing. Por ejemplo, Shiba Inu aprovechó el furor de Dogecoin para apalancarse. Nadie sabe si es bueno o malo, pero estamos seguros de que ayudan, pues brindan mayor visibilidad del mundo cripto. Después, si el proyecto fracasa, y esto trae aparejado una mala imagen, es un riesgo que corremos.
¿Cuál es tu consejo?
Siempre que se hable un poco más, va a ser bueno. Obviamente, hay que tener cuidado con este tipo de inversiones.
Yo no recomendaría poner todos sus ahorros en una criptomoneda que salió hace una semana, pero -al mismo tiempo- tampoco aconsejaría a nadie comprarse una góndola de supermercado como alternativa de ahorro, pues es lo mismo, ya que las criptomonedas son productos.
¿A qué debo estar atento si deseo invertir en criptomonedas?
Hay que fijarse en el proyecto, la trayectoria de éste y considerar el riesgo que uno esté dispuesto a tomar.
Puede haber una criptomoneda nueva, pero si su propuesta de valor es atractiva, se puede ir por ella. Además, no hay que basarse solamente en lo que uno lee en la página web oficial o en terceros, ya que son opiniones que pueden estar influenciadas. Hay que buscar alternativas seguras, tales como Binance Academy.
¿Qué opinan del mercado chileno?
Chile nos resulta un mercado súper atractivo, pues no ha tenido un gran desarrollo en materia de criptomonedas, por lo que nos enfocaremos en la labor de informar a la gente de ellas, a través de eventos digitales y presenciales, entre otras muchas iniciativas que llevaremos a cabo en el plano local.